El principal objetivo de un Sistema de Administración de Riesgos de Procesos (SARP) consiste en prevenir eventos indeseables que pudieran afectar la seguridad de las instalaciones, y en consecuencia la salud, tanto de los empleados de la empresa como de los habitantes de locaciones vecinas, al medio ambiente o a la imagen de la misma.
Este Sistema de Gestión implica, a partir de una Actitud Proactiva, la identificación, evaluación y finalmente, la mitigación o prevención de los Riesgos de Proceso que podrían producirse como consecuencia de fallas en los procesos, procedimientos o equipos.
El SARP de ANCAP tiene por objetivo mantener la operativa de los procesos industriales en ausencia de riesgos no tolerables. Su desarrollo implica entre otras cosas que:
• Las instalaciones, equipos y operaciones se ajustan a las normas específicas del SARP y se toman en cuenta todos los riesgos potenciales de la operación.
• Se evalúan y mejoran los métodos de trabajo aplicando un programa sistemático de seguimiento, auditorías y revisión.
• Se definen y documentan las políticas, normas y procedimientos aplicables a las actividades.
• Se describen las actividades llevadas a cabo.
• Se definen y documentan todos los procesos empleados para implementar políticas, normas y procedimientos.
• Es posible medir la actuación con respecto a temas de SARP.
• Es posible lograr y demostrar el mejoramiento continuo.
• Los temas de SARP están completamente integrados en el negocio.
• Se racionalizan y ajustan las actividades de SARP para agregar valor, eficiencia y efectividad.
• Se promueve la participación del personal en todos los elementos del SARP.
• Se trabaja de manera integrada con los contratistas para lograr su máximo desempeño.
